Caminaba por la calle; recién había terminado mi cita con el dentista. Estaba concentrado en el dolor que sentía por los procedimientos que mi dentista colombiano me había realizado. Cuando de repente, observo a una niña que jugaba con una pared. Ella no veía letras, ella solo miraba lineas rectas y curvas. Jugaba con su dedo, siguiendo estas lineas y curvas. No se preocupaba por como sonaban juntas, o si creaban algo todas esas lineas, solo se preocupaba por mover su dedo tal y como tenian la forma esas letras.

Me hizo pensar, ¿será que somos como niños, que no ven las letras, solo siguen las formas que tienen las cosas que nos pasan alrededor? Porque lo que para nosotros puede ser algo sin sentido o un juego porque no sabíamos lo que significaba, para los seres que lo entienden, significa respuestas, que para nosotros serán incomprehensibles.